Pequeños rimbauds, también nosotros saldremos mañana en busca de nuestros negros, de nuestros otros, de todos esos extranjeros que albergamos. Mr. Chalk tomó la delantera y, tras andar el camino del Norte, fondeará un día en aguas del sol naciente. Kowalski hará lo propio en breve, imagino que a pie: es lo que corresponde a un hombre sin otra patria que sus zapatos. Dará con un bosque y en su centro algo en los huesos le reclamará establecerse allí, llevar lo doméstico hasta allí, permanecer erguido en medio de sí mismo allí. Turner ya no será Turner: un cambio de piel, otra muerte en otro nombre.
Hemos guardado los cuchillos. Dejamos bien visibles algunos tajos. Campen por donde quieran, que aquí ya no vive nadie.
7 comentarios:
Es una lástima perderte la pista, perderte de vista, Mr Turner, pero en fin, espero que sea para bien (como se suele decir), cómo no. Un abrazo.
Jo que pena. Pa' un blog que me mola. Espero que sea temporal.Total, que es el tiempo?
De todos modos, vivir sin moverse es estar muerto, vivir sin viajar y explorar como estar en coma. Bienvenido/s a la vida. Mucha suerte en lo que emprendas/is. Saludos consternados especialmente pa'l abyecto :)
«Sea vida o muerte, sólo anhelamos realidad. Si realmente nos estamos muriendo, oigamos el estertor de nuestras gargantas y sintamos el frío en las extremidades; si estamos vivos, vayamos a lo nuestro.»
(H.D. Thoreau)
Siempre suyo,
J. Kowalski
Impresionante... Vaya, encuentro un blog que me gusta y me topo con una despedida. Espero que nos volvamos a encontrar.
BUENA VIDA, ESPECIALMENTE PARA VOS, DAVID. INDIA, DESDE ARGENTINA.
vaya, lo que pretendia ser una visita de saludo fugaz ha devenido una despedida tardía...
saludos invernales míos, de las extranjeras que habito y las que me habitan.
buen viento y buena mar!
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